Este es el blog de Antonio Rivera Carrasco, cronista oficial de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Jerez de los Caballeros desde el año 2001 hasta el año 2018. Todos los artículos y fotografías publicados en este Blog están sujetos a la legislación sobre derechos de autor, con lo que necesitarás autorización previa del autor o autores de los mismos para cualquier uso que se haga de ellos. Aportaciones y contacto: amriveracarrasco@yahoo.es
jueves, 30 de octubre de 2008
El Nuevo Paso del Santo Entierro y Restauración Del Cristo Yacente Por Tomás Crespo Pitel
El Nuevo Paso del Santo Entierro
En años anteriores hemos reflejado el proceso de modificación que se ha realizado en el paso del Santo Entierro que pudimos ver completamente reformado, aunque de forma fugaz debido a las malas condiciones meteorológicas, en la tarde del Viernes Santo del pasado año.
La primera fase consta de la restauración del Cristo Yacente y la fabricación de las nuevas parihuelas y trabajo de carpintería, así como una muestra del tallado de la madera. Las nuevas andas tienen 8 brazos dobles lo que permite que sean portadas por 16 costaleros. Se estrenó el año 2002. La 2ª fase consiste en el tallado de la canastilla y dorado del conjunto en oro fino y se estrenó el año pasado.
Para ver de un modo gráfico este proceso incluimos varias imágenes que ilustran el mismo a lo largo de sus distintas fases y una explicación que nos ofrece el restaurador jerezano Tomás Crespo sobre el trabajo realizado con el Cristo Yacente.
Restauración Del Cristo Yacente Por Tomás Crespo Pitel.
" La primera operación fue limpieza superficial por el polvo acumulado sobre todo en los huecos. No presentaba repintes por lo que la limpieza fue sólo a nivel superficial. La segunda intervención consistió en tratar las pequeñas grietas y fisuras que presentaba la imagen, ya que es corriente encontrar grietas en imágenes de escayola. Es una figura hecha mediante la técnica del vaciado. Y al ser más frágil que la medra por ejemplo, es fácil que se partan los dedos de las manos, ya que son como finos cilindros de pasta de escayola que se quiebran con cualquier golpe. Dicho esto la siguiente intervención se hizo sobre los dedos partidos, en algunos casos para volver a consolidarlos, pegándolos y añadiéndoles un refuerzo interno y en otros reconstruyendo las partes de estos perdidas, Posteriormente esta reparación hecha con escayola se reintegra cromáticamente. Y la última intervención consistió en reintegrar cromáticamente una especie de picado de puntos blancos que aparecía en el rostro de la imagen y que era el deterioro más visible. Esos puntitos blancos no eran otra cosa que la preparación blanca que subyace debajo de toda policromía. Por algún motivo la finísima película de color realizada mediante la técnica al óleo, se desprende y deja al descubierto la preparación de color blanca. El tener ese aspecto de salpicadura, como si alguien hubiera estado blanqueando sobre al figura, pudiera ser debido a una fuente próxima de calor y efectivamente hay una bombilla justo a la cabeza de la imagen. En los pies se dio este mismo deterioro aunque en menor medida, y también había otra bombilla, También pede ser debido a otras causas aparte o además de esta, pero averiguarlo requiere análisis más profundos y con otros medios técnicos que aquí creo no venían al caso. También se trataron otros daños menores que suelen ser detectados una vez las obras se encuentran en el taller y son objeto de un análisis más minucioso. Y en fin esto fue todo grosso modo. "
Antonio Manuel Rivera Carrasco
Cronista de la Cofradía
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